Por Kristen Carter
Cuando tenemos cáncer de mama y sufrimos terribles efectos secundarios, es muy fácil pensar que somos vÃctimas de nuestras circunstancias.
Aunque es una auténtica putada padecer cáncer y sus efectos secundarios, lo que puede marcar la diferencia entre sentirnos vÃctimas indefensas o participantes con poder en el proceso de tratamiento es lo que pensamos al respecto y las medidas que tomamos. (Incluso es cierto que elegimos ser tratados; técnicamente, esto depende de nosotros).
There’s a construct in psychology called the drama (or victim) triangle that describes the victim situation perfectly. Fortunately, there’s also a positive alternative, which I’ll get to in a moment. First, here’s a little more information about the victim triangle:
First, there’s the victim, us, to whom breast cancer happens.
Next, there’s the persecutor – the thing or person that causes us to feel victimized - in this case the breast cancer itself.
Finally, there’s a rescuer, who swoops in to help us – in our case, doctors and treatment.
Este escenario nos quita prácticamente todo sentido de autonomÃa personal.
If you ever feel a bit victim-y, here is a new way to think about things. It’s called The Empowerment Dynamic, or TED for short. Developed by consultant and author David Emerald, TED offers us the opportunity to choose our responses to life, regardless of the circumstances. In it:
The victim becomes a creator who is aware they have the capacity to create outcomes and choose how to react to life’s challenges.
The challenger, as the antidote to the persecutor, is simply a fact or circumstance that offers the opportunity to respond to and learn from all of life’s experiences.
The coach takes over for the rescuer and offers the ability to learn from asking powerful questions without swooping in to fix things for us. The coach can be a friend, an actual coach, or even yourself, using the TED book or workbook.
En el centro de la dinámica del empoderamiento está aprender a pasar de reaccionar a elegir nuestra respuesta a lo que nos ocurre.
Descubrà TED por primera vez en 2018, el año de mi diagnóstico de cáncer de mama metastásico. Resonó profundamente en mà debido a mi cáncer, pero también porque resultó que habÃa aprendido un comportamiento victimista de mi familia. Como resultado, hice de 2019 mi "año de la creatividad" e hice algo -y lo publiqué en Facebook- todos los dÃas de ese año. A veces era tan simple como compartir una foto que tomé de una flor silvestre, pero lo hice.
Me cambió la vida. Mi mentalidad cambió y pensé, sentà y me comporté de forma diferente.
Pasé de sentirme de vez en cuando impotente y apenada por mà misma a sentirme más centrada en lo que querÃa crear, que estaba dedicada a mi continuo crecimiento como persona a pesar de mi diagnóstico, y que podÃa elegir cómo pensar e interpretar lo que me habÃa pasado.
En lugar de rendirme y tener poca energÃa para la acción positiva, empecé a asumir más responsabilidad para tomar decisiones y dar pasos hacia lo que querÃa lograr en mi vida y en el mundo.
Después de mi año de creatividad, incluso empecé un boletÃn semanal y un blog llamado "¿Y ahora qué?" para compartir lo que habÃa aprendido con otras personas que atravesaban circunstancias difÃciles. En 2022, empecé a escribir también para Surviving Breast Cancer.
El resultado ha sido una mayor conexión con gente impresionante, una sensación de significado y propósito, y un sentimiento de logro.
Te deseo de verdad que dejes de sentirte impotente ante el cáncer y todo lo que conlleva, y que te empoderes de tu vida. Si tienes alguna pregunta sobre cómo evolucionar de vÃctima a creador, envÃame un correo electrónico a kristen@survivingbreastcancer.org. Estaré encantada de ayudarte.