Por Cara Scinto
Decir que un diagnóstico de cáncer de mama es abrumador es quedarse corto. Desde el momento en que oyes las palabras "tienes cáncer", la mente se pone a toda máquina. Desde el torbellino de citas, la necesidad de tomar decisiones críticas y el salto a la cirugía y las diversas terapias, no es de extrañar que nuestras mentes se distraigan. Pero aparte de la confusión que nos produce un diagnóstico de cáncer, ¿es posible que los tratamientos estén afectando a nuestra función cognitiva?
¿Qué es exactamente el "quimiocerebro"? Todos hemos oído el término. Quizá también hayamos experimentado en alguna ocasión la niebla asociada al tratamiento del cáncer. Según la Clínica Mayo "Quimiocerebro es un término común utilizado por los supervivientes de cáncer para describir los problemas de pensamiento y memoria que pueden ocurrir durante y después del tratamiento del cáncer". También se conoce como quimio niebla, deterioro cognitivo (relacionado con el cáncer) o disfunción cognitiva. Algunos ejemplos son la disminución de la memoria a corto plazo, la dificultad para encontrar palabras, concentrarse y realizar varias tareas a la vez.
Las causas de los problemas de concentración y memoria no se conocen bien. Según la doctora Dr. Fremonta Meyer, psiquiatra clínica del Departamento de Oncología Psicosocial y Cuidados Paliativos de Dana-Farber Departamento de Oncología Psicosocial y Cuidados Paliativos de Dana-Farber, sugiere que "Ciclofosfamida Adriamicina, 5-FU, y Taxol parecen ser los culpables notables del quimiocerebro, pero hay otros que pueden causar la condición. La quimioterapia de dosis densa puede asociarse con más síntomas de quimiocerebro, pero la quimioterapia puede causar síntomas independientemente de si ese fármaco específico atraviesa la barrera hematoencefálica."
Independientemente de la causa, el quimiocerebro puede ser un efecto secundario frustrante y debilitante del cáncer y su tratamiento. Hay equipos de investigadores trabajando para entender los cambios de memoria que sufren los pacientes de cáncer durante y después del tratamiento.
En Clínica Mayo asocia los siguientes síntomas con el quimiocerebro:
Los signos y síntomas del quimiocerebro pueden ser los siguientes:
- Ser inusualmente desorganizado
- Confusión
- Dificultad de concentración
- Dificultad para encontrar la palabra adecuada
- Dificultad para aprender nuevas habilidades
- Dificultad para realizar varias tareas a la vez
- Sensación de niebla mental
- Corta capacidad de atención
- Problemas de memoria a corto plazo
- Tardar más de lo habitual en realizar tareas rutinarias
- Problemas con la memoria verbal, como recordar una conversación.
- Problemas de memoria visual, como recordar una imagen o una lista de palabras.
Con esto en mente nos dirigimos a survivingbreastcancer.org amiga Cara Scinto. Cara es practicante certificada de demencia, entrenadora personal, con un máster en nutrición y un sitio web ágil y sensato: TheBalancedBod.com. Cara escribe:
"Como si tener cáncer no fuera lo bastante duro, los efectos secundarios del tratamiento pueden parecer aún peores de sobrellevar. El quimiocerebro -un tipo de demencia- puede interferir en la memoria y el juicio, algo que no ayuda a un paciente que tiene que acudir a citas médicas, tomar medicamentos y todas las demás cosas que le depara la vida. La buena noticia es que no tiene por qué durar para siempre. Existen técnicas para hacer frente a este frustrante efecto secundario de la quimioterapia:
1. Haz listas. Si eres un experto en tecnología, utiliza una nota en tu teléfono. Tienes la opción de hacerla compartible con un familiar o con tu médico.
2. Mantén tu mente activa. Rompecabezas de palabras, ponte a prueba mientras ves jeopardy, memoriza un libro infantil corto o asiste a una clase online que te interese.
3. Medita a diario. Puedes utilizar una aplicación como insight timer o ponerte en contacto conmigo para que te prepare una lista de reproducción en YouTube, solo para ti. Practicar la atención plena puede ayudarte a minimizar las distracciones y a dejarte llevar por tu respiración calmada cuando más lo necesites.
4. Cuéntale a un ser querido por lo que estás pasando. Cuéntaselo a tu familia, para que entiendan si olvidas cosas que normalmente no olvidarías. Quizá puedan ayudarte y animarte.
5. Hable con un trabajador social de oncología. Si vivir con los síntomas del quimiocerebro le produce ansiedad o tristeza, busque ayuda. Formar parte de un grupo de apoyo y hacer uso de recursos como survivingbreastcancer.org puede ser un reconfortante recordatorio de que no estás solo."
¿Tienes quimiocerebro? ¿Qué consejos y estrategias nos recomiendas? Envíanos un correo electrónico y cuéntanoslo. (info@survivingbreastcancer.org)